Después de terminar el Getting ready de Sole me di cuenta que tenía algo así como 10 minutos para llegar a la parroquia San Juan Evangelista del colegio Boneo. Claro que estaba en la ciudad de San Lorenzo, unos 25 km de Rosario. y no tenía mucha idea de como llegar a la parroquia en forma rápida. No hay mal que por bien no venga, dice el dicho. Gracias a que se me había roto el celular hacía un par de semanas en otra boda, el flamante GPS del nuevo aparato me guió por el mejor camino. De cualquier manera estaba Jorge Martin Schwab haciendo de 2ndo fotógrafo en la casa de Mati, que por suerte estaba a unas pocas cuadras de la iglesia, y cuando lo llamé para contarle que recién salía de SL, él ya estaba allí. Así que me quedé un poco más tranquilo porque estábamos cubiertos. [Y para el que duda de contratar un 2ndo fotógrafo, tiene que tener en cuenta que no solo permite tener otro punto de vista, ángulo de toma, etc (y obviamente más fotos), sino también como un gran back up!] Igualmente por suerte llegue a tiempo y no hubo problemas… Salvo cuando el cura me “retó” en frente de tooodos los invitados, familiares y obviamente los novios, por estar corriendo y tirándome en el piso en la parroquia (no fue tan así, pero bue). No tuve mejor idea en ese momento, que sacar una foto. jeje
Igual se que fue con onda y de hecho estuvo muy buena la ceremonia. Muy relajado y con algunas particularidades. No en muchos casos el Párroco le ofrece a los novios el micrófono para que digan unas palabras. Y sin dudarlo Matías dijo lo suyo. Otro momento que me llamó un poco la atención, fue cuando invitó a todos a que rodeen a la pareja y levanten las manos dándoles entre todos la bendición y buenos augurios!
Fuegos artificiales a la salida y de ahí directo al salón de Punta Barranca para el Civil, y la fiesta!!!
Y acá por unos segundos fue el centro de atención, gracias al Curita.